LaSalud.mx .- Uno de los principales miedos a los que se enfrentan los seres humanos es la muerte y si a esta le anexamos la palabra “cáncer”, los resultados pueden resultar fatídicos para muchos. El cáncer, o todo lo relacionado a el, se ha insertado en la cultura colectiva como un referente de una de las enfermedades más severas que existen y que puede sorprender sin previo aviso a propios y extraños, más aún cuando toca a una de las partes más sensibles de una sociedad, a los niños y jóvenes.
Y es que según datos arrojados por la Secretaria de Salud, el cáncer infantil comprende de los 0 a los
18 años, y se estima que existen entre 5 y 6 mil nuevos casos al año. La misma dependencia gubernamental señala que el cáncer infantil es la principal causa de muerte por enfermedad en mexicanos entre 5 y 14 años de edad.
“Uno de los primeros pasos para vivir de la mejor manera posible una etapa de cáncer especialmente cuando se presenta en niños es ver a este como una enfermedad que se puede llevar a buen término, donde la palabra salvación y cura tienen cabida, necesitamos quitarle el estigma de fatalidad con que se maneja y esto lo podemos hacer realizándonos chequeos constantes que nos mantengan tranquilos en cuanto al funcionamiento de nuestro cuerpo. Por lo menos en México un diagnóstico temprano puede salvar el 70% de las pacientes que llegan a un hospital con esta enfermedad. Si bien no se puede prevenir, una buena alimentación es fundamental para no ser propensos a padecerlo. Un niño curado de cáncer, es una nueva esperanza para la sociedad En el Hospital DioMed contamos con las instalaciones, personal y tratamiento adecuado para ayudar a nuestros pacientes en este proceso”, destacaron los Oncólogos Pediatras Dr. Iván Castorena Villa, Liliana Velasco Hidalgo, Farina Arreguín González y Marco Rodrigo Aguilar.
Este tipo de padecimiento se presenta de forma particular en cada organismo y en lo referente a los tratamientos para erradicarlo, estos serán y funcionarán de manera diferente en niños que en adultos, por lo que la confusión puede ocasionar problemas aún mayores.
Pese a que queda claro que la enfermedad no se puede anticipar, si tú hijo o algún joven que conozcas presenta algunos de estos síntomas, el Hospital DioMed recomienda acudir inmediatamente con un médico para que reciba la atención necesaria.
· Crecimiento irregular del abdomen
· Dolores de cabeza persistentes
· Sangrado anormal en nariz o encías
· Dolor persistente en huesos y articulaciones
· Crecimiento anormal de bolitas en el cuerpo
· Puntos rojos o morados en la piel (petequias)
· Sudoración nocturna o excesiva
· Fatiga, cansancio o apatía sin causa aparente
· Fiebre persistente que no cede con el tratamiento convencional.
Aunque la ciencia avanza a pasos agigantados el cáncer infantil y/o juvenil no se puede prevenir, expertos señalan que cada 4 horas fallece un niño a causa del cáncer en México y aunque la enfermedad se puede presentar de muchas formas, algunos de los tipos de cáncer más comunes según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en niños son:
· Leucemia: La leucemia es un cáncer que se origina en las células primitivas productoras de sangre de la médula ósea, la parte suave del interior de ciertos huesos. Con mayor frecuencia, la leucemia es un cáncer de los glóbulos blancos, pero algunas leucemias comienzan en otros tipos de células sanguíneas. Representa una tercera parte de todos los cánceres infantiles.
· Linfomas: Los linfomas son un tipo de enfermedades neoplásicas (tumorales) que afectan a los linfocitos, células que forman parte de nuestro sistema inmune. En general, el linfoma es un tipo de cáncer que se desarrolla cuando se produce un fallo en la forma de actuar de los linfocitos (células blancas de la sangre que ayudan a luchar contra las infecciones). Este fallo provoca la creación de una célula anormal que se convierte en cancerosa. En términos estadísticos, en México es el segundo grupo de neoplasias más común.
· Tumores del sistema nervioso central: (SNC) Comienza cuando células sanas del cerebro o de la médula espinal cambian y crecen fuera de control, formando una masa. Un tumor del SNC resulta especialmente problemático porque los procesos de pensamiento y los movimientos de la persona pueden verse afectados. Puede ser complicado tratar este tipo de tumor porque los tejidos que lo rodean suelen ser vitales para el funcionamiento del cuerpo.
Recuerda que, si tu hijo algún niño que conozcas presenta algunos de estos síntomas, es importante visitar a un especialista Oncólogo que te pueda orientar, puesto que se trata de niños y por su condición resulta complicado que ellos lo detecten por sí mismos, es parte de la obligación de los padres mantener un monitoreo constante de los menores que están a nuestro lado.