La buena nutrición de la mujer es primordial no sólo para mantenerse sanas y activas sino también para que, cuando lo decidan, tengan mayores probabilidades de tener un embarazo exitoso y niños sanos.
Por lo general, la mujer se preocupa de la alimentación de cada integrante de la familia pero por otro lado suele olvidarse de cuidar su salud y nutrición.
En México:
· Uno de cada cuatro hogares es encabezado por una mujer.
· Más de la mitad de las mujeres se encuentra en edad fértil.
· La esperanza de vida en mujeres es casi 5 años más que para los hombres.
· Una de cada 6 mujeres muere a causa de Diabetes mellitus, lo que representa la primera muerte en esta población.
· De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición del 2006, alrededor del 15% de las mujeres presenta anemia por deficiencia de hierro y no cubren las recomendaciones de ingestión de ácido fólico y calcio.
Debido al ritmo de vida actual, en ocasiones la mujer no se alimenta de la forma adecuada, por lo que no consume ni la variedad ni la cantidad de nutrientes que necesita. Por otra parte, el querer estar delgada, de acuerdo a los cánones de belleza, lleva a muchas mujeres a realizar dietas para bajar de peso muy bajas en calorías, que causan deficiencias en algunos nutrimentos y que en ocasiones pueden provocar verdaderos problemas de salud, ya que no se cuenta con la supervisión de un profesional en materia.
Las necesidades energéticas y nutricionales de la mujer varían con la edad y las distintas etapas de vida. La dieta ideal de una adolescente tendrá unas necesidades energéticas y nutricionales diferentes a las de una mujer embarazada, en periodo de lactancia o posmenopáusica.
En el caso de las mujeres embarazadas o en periodos de lactancia, se debe cuidar especialmente la alimentación, ya que no sólo debe garantizar el aporte energético y nutricional necesario para mantener la salud de la madre, sino que también debe asegurar el óptimo desarrollo del bebé.
La dieta ideal para la mujer será aquella que satisfaga sus necesidades, que sea variada y equilibrada, que asegure el aporte de todos los nutrimentos necesarios en la cantidad adecuada y que se ajuste a sus gustos, hábitos y preferencias para que resulte fácil de llevar a cabo.
Algunas recomendaciones generales que ayudarán a la mujer a prevenir algunos padecimientos comunes son:
- Consumir de forma habitual, lácteos o sus derivados ya que estos alimentos ayudan a cubrir las necesidades de calcio y vitamina D, necesarios para el mantenimiento de huesos fuertes y ayudar a prevenir la osteoporosis, padecimiento que es muy común en mujeres durante la posmenopausia.
- Incluir en la alimentación, carnes rojas, leguminosas y verduras de hoja verde que son buenas fuentes dehierro. Un consumo adecuado de hierro ayuda prevenir la aparición de anemia por deficiencia de este mineral.
- Comer frutas y verduras, ya que representan fuente importante de vitaminas, minerales y fibra.
- Se ha visto que el consumo de algunos nutrimentos como el calcio, magnesio, vitamina B6 y vitamina D ayudan a disminuir los síntomas del síndrome premenstrual.
- Durante la edad adulta se presenta mayor riesgo de padecer enfermedades crónico- degenerativas, por ello, es importante consumir alimentos que te proporcionen antioxidantes como frutas, verduras, semillas oleaginosas, aceites y vegetales.
- Consumir ácidos grasos omega 3 y 6, ya que puede ayudar a reducir el riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares. Estos ácidos grasos se encuentran en: aceites vegetales como el de oliva, cártamo, soya o canola y pescados.
- Tomar suficiente agua, de 2 a 3 litros al día, te ayudará a mantenerte bien hidratada.
- Realizar 30 minutos de actividad física diaria te ayudará a mantener tus huesos fuertes y prevenir algunos padecimientos.
Por tanto, la elección de alimentos y estilo de vida determinan el bienestar presente y futuro.