De acuerdo a un estudio en la Cuidad de México se encontró que el 33% de la población padece deficiencia de Vitamina B12 y el 8% presenta una deficiencia severa.
El 5.1% de las mujeres en edad productiva tienen algún tipo de deficiencia de vitamina B.
Nuestro cuerpo está expuesto a situaciones llenas de presión y estrés que pueden provocarnos ciertas deficiencias nutricionales y relacionarse a algunas enfermedades del sistema nervioso o deficiencia de vitamina B mismas que pueden manifestarse en el cuerpo como entumecimiento, hormigueo y tics.
La obesidad y sus consecuencias en la salud de la población mexicana además del alto costo para el Sector Salud han propiciado que esta se convierta en una preocupación social disminuyendo el interés por otros problemas de salud en la población entre los que se encuentra la falta de micronutrimentos como lo son la vitamina B12, el hierro y el zinc.
Un estudio demostró que el 5.1% de las mujeres en edad reproductiva presentan deficiencia de vitamina B12 por lo que al no contar con una reserva adecuada de dicha sustancia y de hierro antes del embarazo será un factor de riesgo para presentar anemia durante dicho gestación2.
El 14.5% de pacientes mayores presenta deficiencia de esta vitamina3 lo que puede llegar a causar anemia y potencial daño cerebral además de pérdida de equilibrio, entumecimiento u hormigueo en los brazos y piernas además de debilidad generalizada.
“La deficiencia de micronutrimentos puede tener diversas causas entre las que destacan: una mala dieta y/o insuficiencia en la calidad de la ración alimenticia. Por ello es de suma importancia consumir una dieta balanceada además de combinarla con una dosis óptima de complejo B (vitamina B1, B6 y B12)” indicó la Dra. Ana Gabriela Gómez Velázquez, Gerente Médico del área Consumer Health de Merck, laboratorio químico farmacéutico alemán con 345 años de experiencia.
Las vitaminas del complejo B son una excelente ayuda para el correcto funcionamiento del organismo, ya que la vitamina B1 (tiamina) es esencial para el crecimiento y desarrollo normal, ayuda a mantener el funcionamiento propio del corazón, sistema nervioso y digestivo. La vitamina B6 (piridoxina) ayuda a producir anticuerpos, mantiene al sistema nervioso funcionando adecuadamente e incrementa el rendimiento muscular y la producción de energía. La vitamina B12 (cianocobalamina) contribuye al buen funcionamiento del sistema inmune y conserva en buen estado el sistema nervioso.
La carencia de estas vitaminas (B1,B6,B12) puede provocar, irritabilidad, falta de memoria y capacidad de concentración, falta de destreza mental, cansancio, alteraciones en la piel como resequedad, alteraciones del sistema nervioso manifestadas como entumecimiento, hormigueo en las extremidades y movimientos involuntarios mejor conocidos como tics.
Las molestias corporales del sistema nervioso antes referidas pueden presentarse en la población que constantemente vive situaciones de estrés, siendo los principales afectados aquellos que tiene una vida laboral activa, acelerada y en ocasiones combinada con patrones de estilo de vida poco saludable como el tabaquismo, dieta desequilibrada y poca actividad física.
Debido a que una deficiencia en cualquiera de las vitaminas del complejo B puede contribuir a estrés, problemas de concentración, ansiedad, fatiga, entumecimiento y hormigueo se recomienda se complemente la alimentación con la ingesta diaria de estas vitaminas y así mantener una buena calidad de vida.